2 de enero de 2010
La izquierda, una nueva esperanza para Tlajomulco de Zúñiga.
Cerca de dos mil personas se congregaron este jueves en la explanada del ayuntamiento municipal para apoyar a la nueva administración, donde muchos le dieron la bienvenida a Enrique Alfaro y le desearon mucha suerte para su mandato 2010-2012, siendo uno de los más prometedores y en la cual está toda la expectativa de la población. 
La plaza central de Tlajomulco se convirtió en el último día del año 2009 en un verdadero espectáculo de grandes dimensiones. Desde las primeras horas del día se vio un fuerte dispositivo de seguridad y en las principales calles era prohibido el estacionamiento de vehículos, este último hecho, calificado por visitantes y tlajomulquenses como una acción arbitraria que no debería realizar todavía la nueva administración por no tener jurisdicción: no era primero de enero, periodo en que empezarían a gobernar.
La plataforma de la presidencia municipal fue el escenario para última sesión de cabildo de Antonio Tatengo y la toma de protesta de Enrique Alfaro. La comitiva del ahora presidente cuidó hasta el más mínimo detalle de los preparativos, que a juzgar por lo visto, se puede calificar como el magnoevento del 2010 en este territorio.
La plaza dejaba a un lado su imagen mustia y por unas escasas horas los colores claros y el atinado diseño ambiental le daban una imagen diferente, para convertirla en un foro donde el recuento de lo que supuestamente se hizo, las promesas de una controversial campaña 2009, charlas políticas y las notorias rivalidades entre Alfaro Y Tatengo acaparaban la atención de quienes tienen la esperanza de la nueva historia de Tlajomulco.
Grandes trailers con equipos de sonido ocuparon calles de la plaza, donde prepararon el escenario para que los presentes se deleitaran con la banda San Miguel, el mariachi Rosales, además de arlequines que alegraron desde medio día hasta bien entrada la noche.
La buena selección de música grabada tuvo atinados comentarios entre entendidos en la materia: “Color esperanza”, Diego Torres, la sublime obra de la irlandesa Enya, además de “Yo vengo a ofrecer mi corazón”, en la magistral interpretación de Mercedes Sosa, si esta nueva administración sigue la idea de algunas de las canciones de estos interpretes, sí haríamos honores a las promesas de campaña de nuestro Presidente: ayudar a los más necesitados sin perder nuestra esencia.
Lo más lindo para cada persona es sentir orgullo y sentido de pertenencia de su tierra, para eso se debería garantizar la calidad en los servicios básicos como la salud, el agua y el transporte, estos aún son muy deficientes en Tlajomulco, y debería ser prioridad para Enrique Alfaro y su gabinete.
La emigración no sólo es de un país a otro, también de ciudades a ciudades y de pueblos a pueblos; el resultado de esto son grandes necesidades, muchos creen suplir sus esperanzas con promesas de campañas que por años ha sido víctima este país. Creo es tiempo de proponernos proyectos medianos, pero de gran beneficio para que se puedan cumplir en estos próximo casi tres años que durará la administración.
Es tiempo de que los políticos se acerquen más a las verdaderas necesidades de la gente. Los oropeles y majestuosos eventos, dejémoslo al espectáculo, hagamos todos desde ahora …la nueva historia de Tlajomulco de Zúñiga, con ellos, sin ellos o a pesar de ellos.
La plaza central de Tlajomulco se convirtió en el último día del año 2009 en un verdadero espectáculo de grandes dimensiones. Desde las primeras horas del día se vio un fuerte dispositivo de seguridad y en las principales calles era prohibido el estacionamiento de vehículos, este último hecho, calificado por visitantes y tlajomulquenses como una acción arbitraria que no debería realizar todavía la nueva administración por no tener jurisdicción: no era primero de enero, periodo en que empezarían a gobernar.
La plataforma de la presidencia municipal fue el escenario para última sesión de cabildo de Antonio Tatengo y la toma de protesta de Enrique Alfaro. La comitiva del ahora presidente cuidó hasta el más mínimo detalle de los preparativos, que a juzgar por lo visto, se puede calificar como el magnoevento del 2010 en este territorio.
La plaza dejaba a un lado su imagen mustia y por unas escasas horas los colores claros y el atinado diseño ambiental le daban una imagen diferente, para convertirla en un foro donde el recuento de lo que supuestamente se hizo, las promesas de una controversial campaña 2009, charlas políticas y las notorias rivalidades entre Alfaro Y Tatengo acaparaban la atención de quienes tienen la esperanza de la nueva historia de Tlajomulco.Grandes trailers con equipos de sonido ocuparon calles de la plaza, donde prepararon el escenario para que los presentes se deleitaran con la banda San Miguel, el mariachi Rosales, además de arlequines que alegraron desde medio día hasta bien entrada la noche.
La buena selección de música grabada tuvo atinados comentarios entre entendidos en la materia: “Color esperanza”, Diego Torres, la sublime obra de la irlandesa Enya, además de “Yo vengo a ofrecer mi corazón”, en la magistral interpretación de Mercedes Sosa, si esta nueva administración sigue la idea de algunas de las canciones de estos interpretes, sí haríamos honores a las promesas de campaña de nuestro Presidente: ayudar a los más necesitados sin perder nuestra esencia.
Lo más lindo para cada persona es sentir orgullo y sentido de pertenencia de su tierra, para eso se debería garantizar la calidad en los servicios básicos como la salud, el agua y el transporte, estos aún son muy deficientes en Tlajomulco, y debería ser prioridad para Enrique Alfaro y su gabinete.
La emigración no sólo es de un país a otro, también de ciudades a ciudades y de pueblos a pueblos; el resultado de esto son grandes necesidades, muchos creen suplir sus esperanzas con promesas de campañas que por años ha sido víctima este país. Creo es tiempo de proponernos proyectos medianos, pero de gran beneficio para que se puedan cumplir en estos próximo casi tres años que durará la administración.
Es tiempo de que los políticos se acerquen más a las verdaderas necesidades de la gente. Los oropeles y majestuosos eventos, dejémoslo al espectáculo, hagamos todos desde ahora …la nueva historia de Tlajomulco de Zúñiga, con ellos, sin ellos o a pesar de ellos.
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